Nearshoring y Desarrollo Ágil de Software

Cuando las empresas buscan socios para desarrollar su software, una de las principales consideraciones que deben tener en cuenta son el proceso y metodologías que utilizará su nearshoring partner para desarrollar soluciones a la medida. Las desarrollo Ágil de software permiten a las empresas de software ofrecer resultados de alta calidad y de manera eficaz a través de la colaboración con el cliente. El proceso ágil de desarrollar una aplicación web o móvil está diseñado para proporcionar al cliente feedback regularmente y así mismo poder trabajar de una manera colaborativa donde se puede intercambiar información con el objetivo de cubrir de más manera más ágil los objetivos específicos del cliente.
A continuación nombramos algunos puntos claves, que se deben tener en cuenta para poder trabajar con un equipo de desarrollo ágil de software de una manera eficiente:
Procesos e Interacciones
El desarrollo de software ágil debe considerar a los usuarios finales de las soluciones, es de vital importancia revisar los procesos y herramientas que los usuarios usarán al mismo tiempo en el que se desarrollan las aplicaciones/ soluciones. Por supuesto, las interacciones del usuario conducen al proceso, pero el desarrollo ágil comienza con el usuario con la necesidades básicas del usuario. Debido a este enfoque sobre el cliente y el usuario final, es posible crear un proceso de desarrollo relacional, como en cualquier relación, el éxito depende de una comunicación clara y efectiva.
Los clientes a menudo comienzan con las funciones que sus usuarios necesitan para resolver sus desafíos y problemas, sin embargo, a menudo no tienen la experiencia o el conocimiento necesarios para entregar el producto final a sus usuarios. Cuando eliges un socio de nearshoring adecuado, este se logrará aportar el nivel de experiencia necesaria para entregar el proyecto final con óptimos resultados y así proporcionar lo que realmente se necesita para las aplicaciones o soluciones digitales.
Metodologías Agiles de Software
Las metodologías ágiles se pueden definir como “tener un carácter rápido y adaptable”. Las empresas hoy en día necesitan ser más ágiles en sus procesos, respuestas, sistemas, etc. Deben adaptarse a los desafíos de las actividades cotidianas y a la misma vez deben estar alineadas con sus objetivos de largo plazo. Así que el desarrollo ágil de software se construye con la mentalidad de adaptabilidad al cambio. Adicional a esto, la programación de intervalos cortos incorporada brinda al cliente la oportunidad de verificar el progreso y detectar cambios antes de que continúe el proceso del desarrollo. Este proceso ofrece resultados más rápidos al reducir la necesidad de retroceder varias versiones para realizar los cambios que se necesitan.
Los servicios de nearshoring de tecnología son perfectos para el desarrollo ágil de software. Tener a los equipo de desarrolladores en países vecinos o cercanos y dentro de una zona horaria cercana, significa que la colaboración puede ser más rápida y efectiva.Adicionalmente, evita tener que esperar días para las obtener respuestas ya que es posible agendar reuniones en tiempo real para obtener los resultados que el cliente desea de manera casi inmediata. Con reuniones regulares, durante el horario de oficina, los equipos de desarrollo y el cliente pueden crear un verdadero entorno de trabajo colaborativo.
Participación del Cliente
Un enfoque en la participación del cliente, fomenta la colaboración y permite cubrir rápidamente las necesidades de los clientes. Cuanto menos tiempo dedican los desarrolladores a reescribir el código, más tiempo pueden dedicar a trabajar en nuevas funciones o en la siguientes etapas de los proyectos.
A diferencia de las metodologías de software que se centran en los desarrolladores y se llega a un punto donde la aplicaciones se construyen con supuestos, es inevitable predecir o anticipar cuando los equipos de desarrollo tengan que volver a realizar cambios para ajustarse a los requerimientos puntuales de los clientes.
La Capacidad de Respuesta al Cambio
Las metodologías ágiles permiten que los equipos de desarrollo sean flexibles a las demandas cambiantes de los clientes y mercados. Tener la capacidad de responder rápidamente a las condiciones cambiantes es una de las ventajas de los equipos ágiles de software. Trabajar con equipos que siguen este tipo de metodologías obliga a los equipos a adaptarse a los cambios de manera más fácil que a un plan de proyecto estático. El desarrollo de software en intervalos también le permite a un equipo tener un mayor control sobre la necesidad de trabajar el “doble” para resolver problemas en cualquier etapa del proceso de desarrollo de software. Otro beneficio de los desarrollos ágiles de software es la visión clara que logra tener el equipo sobre los problemas previsibles y cómo es posible ahorrar tiempo anticipándose a las situaciones.
El desarrollo de software es un proceso iterativo: los miembros de los equipos de software se pueden agregar o modificar en cualquier punto de este proceso, por eso es vital contar con un equipo multidisciplinario, en el que cada miembro del equipo sea lo suficientemente flexible para manejar los cambios requeridos por el proyecto. La definición de metas y objetivos claros para cada función permitirá a los nuevos expertos ponerse al día de forma rápida con sus proyectos.
Los métodos ágiles dependen de equipos flexibles, las demandas de los clientes y usuarios requieren que los equipos de desarrollo respondan a los cambios requeridos durante el proceso de desarrollo, es por eso que es necesario mantener una comunicación colaborativa la cual permite los pequeños cambios en la medida en la que se va progresando y antes de que sean necesarios cambios importantes.
Cuando el equipo tenga una visión clara y actualizada del proyecto, podrá identificar los próximos pasos a seguir más eficientes y cualquier obstáculo en el camino. También establecerá los parámetros para los cambios y hará que esos cambios sean manejables y puedan adaptarse rápidamente. El desarrollo ágil de software permite soportar las metas y objetivos claramente definidos dentro de un proyecto y de la misma forma garantiza terminar los desarrollos de manera exitosa a tiempo y dentro del presupuesto.